Volvieron a la Argentina las jugadoras de River detenidas en Brasil

Después de casi dos meses de espera, las jugadoras de River detenidas en Brasil por gestos racistas e insultos volvieron a la Argentina. ¿Cómo sigue el proceso? ¿Pueden ir a la cárcel? ¿Qué decidió el juez? Te lo contamos.

Las jugadoras de River Candela Díaz, Milagros Díaz, Camila Duarte y Juana Cángaro regresaron a la Argentina este viernes, luego de estar casi dos meses detenidas en Brasil por gestos racistas e insultos tras el partido ante Gremio por el torneo Ladies Cup, disputado el  20 de diciembre.

Aquel encuentro finalizó con peleas entre las futbolistas en el campo y cinco detenidas, entre ellas Candela Díaz, quien hizo gestos racistas hacia uno de los alcanzapelotas que la venía escupiendo e insultando durante todo el partido.

Nada justificará jamás los actos de discriminación y la violación a la ley (en este caso la 7.716 contra el racismo y la xenofobia), pero ciertamente se notaba un ensañamiento con este caso.

Y es que esa noche cinco jugadoras fueron trasladadas a una comisaría en una patrulla policial. Una de ellas fue liberada a las tres horas ya que no existían pruebas en su contra. Sin embargo las demás pasaron varias horas detenidas mientras se tomaban las declaraciones de testigos (entre ellos, jugadoras de Gremio) sobre lo sucedido. Recién en la madrugada les permitieron comunicarse con sus familias y cambiarse de ropa. Algunas llegaron a hacer una videollamada rápida para poder avisar que estaban bien.

Al otro día, las trasladaron a un penal de mujeres. Les permitieron estar siempre juntas, aunque no las dejaron comunicarse nuevamente con sus seres queridos, algo que recién pudieron hacer el 23 de diciembre. Ese fin de semana, una abogada brasileña que llevaba el caso fue la única que pudo hablar con ellas y entregarles algunos objetos, como una carta de sus familias.

“Allá no es como acá” era una frase que se repetía. Insistimos con que no tiene justificación lo que pasó dentro de la cancha y las reacciones se tendrían que haber pensado antes, pero este caso siempre estuvo marcado por un trato desproporcionado respecto de otras situaciones similares.

Pasada la Navidad, River abonó una suma importante de dinero y presentó varios recursos de habeas corpus para poder liberarlas y continuar con el procedimiento fuera del penal. El pedido también incluía volver a Argentina, pero en esas fechas, siendo fin de año, tenía lugar la feria judicial que terminaba recién el 6 de enero.

Finalmente, el 27 de diciembre les otorgaron la libertad y se ubicaron en un departamento de alquiler donde debieron aguardar más de un mes y medio. Ahí también siempre se mantuvieron juntas y en todo ese tiempo únicamente las pudo ver la abogada mencionada y un abogado, gerente del área de legales, de la institución millonaria que viajó a Brasil.

El comunicado de River tras lo ocurrido en el partido ante Gremio

River siempre acompañó a las jugadoras y se puso a disposición de la Justicia brasileña, pero también reclamó que, como futbolistas y trabajadoras vinculadas a la institución que asumió ese compromiso, les permitieran regresar al país y continuar así el proceso.

Ya en este mes, con el Torneo Apertura iniciado -en el que lógicamente participan-, River realizó una nueva presentación ante el tribunal superior de Justicia: las cuatro jugadoras ya no tenían nada que hacer en Brasil, teniendo en cuenta que la audiencia fijada por el juez tiene fecha para julio. Una audiencia que, además, es virtual.

Finalmente, cuando parecía que debían aguardar hasta mitad de este año, el Juez autorizó a las cuatro jugadoras a regresar. Por eso hoy, 14 de febrero, Candela Díaz, Juana Cángaro, Milagros Díaz y Camila Duarte volvieron al país y se reencontraron con sus familias.