La jugadora Mapi León fue acusada de tocar los genitales de su rival Daniela Caracas y puso en tensión al mundo del fútbol. ¿Qué sanción le corresponde?
El 9 de febrero Mapi León, jugadora del Barcelona, tuvo un encontronazo con Daniela Caracas en el partido contra el Espanyol. En ese forcejeo entre ambas la transmisión mostró cómo la española le tocó los genitales a la colombiana mientras la provocaba. Si bien en el momento esto no causó revuelo, al día siguiente el Espanyol publicó un comunicado en el que repudió la actitud de la defensora culé y se puso a disposición de Caracas en caso de que quisiera iniciar acciones legales contra su colega.
Por su parte, Mapi León realizó un descargo en el que negó haber tocado a Caracas, denunció una mentira y, en algún punto, intentó pedir disculpas si su actitud se malinterpretó. El Barcelona apoyó y compartió su mensaje y sus compañeras la bancaron en entrevistas y conferencias de prensa, pero la jugadora aún guarda silencio.
Esto insertó en el mundo del fútbol un debate sobre un tema al cual el reglamento todavía no llegó: los roces. ¿Hasta dónde tocar al otro es parte de un forcejeo? ¿Vale cualquier tipo de roce? ¿El gesto de Mapi es parte del juego o es un abuso? Lo cierto es que la normativa de la FIFA no especifica con detenimiento este punto muy importante, ya que no es la primera vez que suceden estas cosas en el mundo del fútbol.
Un ejemplo reciente fue el caso de Lucas Ocampos, jugador del Rayo Vallecano y de la Selección argentina que en febrero de 2024 fue tocado por un hincha en sus genitales. En aquel entonces, Ocampos declaró ante la prensa que esperaba que el club y la Liga tomaran las acciones necesarias contra esta persona para que no ocurra otra vez “y ojalá nunca pase en el fútbol femenino porque sería un escándalo”.
Más atrás en el tiempo, en 2005, el fútbol argentino masculino también fue escenario una situación similar. Fue en un partido entre River y Banfield por la Copa Libertadores en el que Chipi Barijho cometió una falta sobre Horacio Ameli, a quien dejó tendido en el piso. Cuando el jugador de Banfield se acercó, supuestamente, a preguntarle si estaba bien, le tocó la cola, motivo por el que vio la tarjeta roja.
Hoy hay algunos clubes que prefieren prevenir y no curar. El más claro es el de la National Women’s Soccer League (NWSL), que hace pocos días anunció la creación de un fondo de cinco millones de dólares para financiar las indemnizaciones a jugadoras víctimas de abuso sexual y psicológico.
Si bien el caso de Mapi León y Daniela Caracas aún está en análisis y no se han tomado medidas por el momento, es importante resaltar que tocar a alguien en sus genitales sin su consentimiento no es otra cosa que un abuso sexual.